La luz de las demosponjas

Hacía mucho ya que no escribía, ni siquiera para contar mi viaje por África, ni para colgar alguna foto.
No he tenido tiempo ni ganas; había dejado mi confesionario público un poco olvidado, en segundo plano.
Pero hoy no podía dejar de acudir a él para anunciar a todos que, después de haber visto como pasaban 4 interminables años del trabajo de una persona en una sola mañana, y varios años más de su vida en escasa media hora, me siento muy feliz, muy feliz, de formar parte de esos momentos que han contribuído a construír toda una mañana de emociones (nervios, risas, llantos…).
Enhorabuena Ana, estoy muy orgulloso, y, sin poder evitarlo, me siento parte de lo que has conseguido, tanto dentro como fuera de la tesis. Estoy seguro de que hay pocas, muy pocas personas, que hayan llegado en tan poco tiempo a donde estás tú. Y no hablo de ciencia, que para eso basta con ser inteligente; yo tengo que unirme a las palabras de Benjamín.
¿Te das cuenta ahora de todo lo que tienes?
Muchos besos enAna.

3 Respuestas a “La luz de las demosponjas

  1. Claro que me doy cuenta de todo lo que tengo. Me falta algo, y lo sabes. Pero tengo tantas cosas que casi no me dejan tiempo de notarlo. A pesar de que lo note diariamente.
    Gracias por estar ahí, por conducirme con la mirada. Por saber abrazarme para darme todas las fuerzas que necesité. Jamás hubiera podido hacer esto sin (todos, claro) ti.
    Y me has hecho llorar con esto. Ya sé que no es difícil…Bsk

    Me gusta

  2. y yo mientras, perdiéndome el mundo normal

    Me gusta

  3. Perdiéndote el mundo, anormal. Cada uno tiene su mundo, lo bueno es que siempre llega el momento en que los compartimos. será que tú no tienes nada que contar.
    Y a tí Ana, pues eso… a seguir en el tuyo.
    bss

    Me gusta

Deja un comentario